La Búsqueda para Crear un Trabajo Significativo y Vivir una Vida con Sentido

Photograph by Natalia Curonisy, Machu Picchu - Peru

Photograph by Natalia Curonisy, Machu Picchu - Peru

Recientemente tuve la oportunidad de leer un articulo que forma parte de un curso online “The Focus Course”, de Shawn Blanc.  Realmente me encantó. Quisiera compartir un extracto relacionado con la importancia de los hábitos y cómo impactan en nuestra vida.

 (Lo que sigue es una traducción libre del artículo que menciono)

Practicas de Vida y Hábitos Diarios (The Focus Course by Shawn Blanc)

Este tema es uno de los más importantes de mi vida. Tengo un compromiso personal de vivir conscientemente dándole significado (intención) a tantas áreas de mi vida como pueda. Quiero darle intención a mi matrimonio y cómo educo a mis hijos. Quiero darle intención a mis negocios y finanzas familiares, a mi trabajo creativo, a la forma en que paso mi tiempo, a mi alimentación, y más.

Es tan fácil simplemente ignorar  y pasar de largo estas áreas, reaccionar ante cualquier problema urgente que surja, y permanecer pasivo el resto del tiempo. ¿Les suena familiar? ¿A qué se parece eso? Bueno, se parece a un millón de cosas en realidad. Se parece mucho a la deuda de los consumidores; a las relaciones rotas con nuestros familiares y amigos, nuestros hijos, y nuestra pareja; parálisis y claustrofobia en nuestro trabajo; a muchas horas desperdiciadas en las redes sociales y de ver todos los días televisión.

Tener un trabajo en una empresa con un horario que cumplir no es un fracaso, pero tu actitud hacía él lo puede ser. Ver un programa de televisión no es un fracaso, pero si le estás robando tiempo a tu familia, o el tiempo para hacer el trabajo importante que deberías estar haciendo, entonces probablemente lo es.

Es importante entender que estas acciones no son el enemigo en nuestra búsqueda para crear un trabajo significativo y vivir una vida con sentido, pero sí lo son las razones por las que estamos haciendo esas cosas (o, a veces es la falta de esas razones). ¿Estamos a la deriva, a la espera? ¿Actuamos por reacción? ¿O somos el capitán?

Implementando hábitos diarios puedes tomar acción sobre la visión de tu vida,  tus metas de corto y largo plazo; y moldear tu estilo de vida para que puedas tener éxito en estas áreas.

Aquí es donde te dices a ti mismo:  “quiero estar sano y feliz. Así que voy a tomar decisiones conscientes sobre lo que como, lo que hago, lo que digo, lo que pienso, con el fin de ser más saludable.”

La razón de por qué algo como esto parece "revolucionario" se debe a que muchas personas no viven con disciplina, no viven enfocadas, no viven conscientemente, etc.;  por eso este planteamiento suena "intenso" o "fuera de lo común".  Pero no suena así porque lo sea, sino porque estamos acostumbrados a la mentalidad de “lo que sea”, o “lo que tenga que ser será". Hacemos lo que hacen los demás porque… seguramente tantas personas no pueden estar equivocadas, ¿no?

La implementación de hábitos diarios se basa en la premisa de que a pequeños golpes cayeron grandes robles. Hacer pequeñas cosas con constancia por un periodo de tiempo da grandes resultados y avances.

No es por dar un sermón, pero tú y yo hemos crecido en una cultura que exige resultados de microondas.  Y por eso, hemos adquirido una sed de gratificaciones instantáneas.

Por ejemplo, no nos es suficiente caminar 15 minutos al día para estar más saludables –despreciamos lo simple y humilde de este enfoque. No hay gloria en él.  Así que, en lugar del ello, nos inscribimos en el gimnasio, contratamos un entrenador personal, gastamos $500 en ropa de deporte y bandas de lujo para llevar nuestro iPhone, y nos comprometemos a hacer ejercicio 2 horas al día, 6 días a la semana. El resultado: al poco tiempo quedamos exhaustos y abandonamos el plan.

Sólo un tonto deposita $ 100 en una cuenta de ahorros y regresa al día siguiente esperando que hayan $ 200. Sabemos que las inversiones financieras y el crecimiento de interés compuesto llevan tiempo.  Lo mismo sucede con las inversiones que hacemos con el resto de nuestras vidas.

Tenemos la tendencia a sobrestimar lo que podemos hacer en un corto período de tiempo, y subestimar lo que podemos hacer durante un período largo; trabajemos siempre lenta y constantemente. – Gretchen Rubin

No desprecies los pequeños pasos y los pequeños momentos de la rutina, la diligencia y la fidelidad. Porque esos son los escalones que nos llevan a las grandes cosas por las que nos estamos esforzando.

Mi abuela Josefina

Mi abuela Josefina tenía 94 años cuando murió. Mi abuelo Louie de 98 años estaba allí a su lado, en duelo por la pérdida del amor de toda su vida, pero profundamente agradecido porque fue capaz de estar con ella todo el camino hasta el final.

Su funeral fue a los pocos días. Más de 200 personas fueron a nuestra pequeña ciudad de Castle Rock, Colorado para celebrar, reír y llorar con nosotros mientras compartíamos historias de mi abuela.

La madre de Josefina murió cuando ella tenía solo 11 años, dando a luz a su hermana menor.   Cuatro años más tarde, su padre los abandonó durante la gran depresión, dejando a su hija de 15 años –mi abuela– a cargo de todos sus hermanos.

Ella siempre dijo que fue el poder del pensamiento positivo y la oración lo que la mantenía en marcha; ella se hizo cargo y nunca miró hacia atrás, formando un legado y una familia muy unida.

En el funeral, cuando leyeron sus memorias, nos encontramos con sus "valores" - las cosas que ella trató de vivir. Eran frases cortas: “Sea el primero en saludar”; “Felicite a tres personas cada día”; “Viva por debajo de sus ingresos”; “Deje que la primera cosa que usted diga alegre el día de todos”; “No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”; “Siempre piensa lo mejor de los demás”.

Cuando las escuché, me di cuenta de lo mucho que realmente sus oraciones y su pensamiento positivo habían influido e impactado en toda nuestra familia. Mi abuela era una mujer increíble.

¿Qué significa practicar activamente un estilo de vida? ¿Tener un hábito diario?

Significa que hay rutinas en tu día que haces todos los días. Esto significa que hay cosas que has elegido hacer y también hay cosas que has elegido no hacer.

La idea es doble:  cuando tienes hábitos diarios estás decidiendo intencionalmente cómo vives tu vida.  Has pensado cómo son las cosas, cómo quisieras que sean, y has elegido la forma en que quiere vivirlas. Esto incluye las cosas que haces, las cosas que piensas, lo que dices, lo que sientes, etc.

Puedes elegir tu actitud y tus acciones todos los días hasta que, finalmente, se vuelven parte de ti.

Hacer esto intencionalmente significa que en realidad estás haciendo progresos. En verdad los estás haciendo. No estás viviendo cada día como un trozo de madera a la deriva en el mar.  Has construido un velero y estás aprendiendo cómo navegar los mares y a llegar a donde te has propuesto.

Los hábitos diarios ayudan a desarrollar el carácter. Al elegir no ser crítico o sarcástico, y en su lugar ser sincero y genuino,  estás trabajando para ser una persona más amable y más transparente. Como resultado, estarás más contento contigo mismo, y por eso estarás más contento con los demás, y ellos estarán más contentos contigo.

Los hábitos diarios significan que has reconocido que ser solo un trozo de madera a la deriva no te va a llevar a donde quieres ir. Los hábitos te preparan para el éxito. No garantizan el éxito, pero permiten mantenerte mucho mejor en el camino que simplemente teniendo la idea de un objetivo en la cabeza.

F.M. Alexander dijo: "La gente no decide su futuro, su futuro lo deciden sus hábitos y sus costumbres."

Y John C. Maxwell dijo: "Nunca vas a cambiar tu vida hasta que cambies algo que haces todos los días. El secreto de tu éxito se encuentra en tu rutina diaria ".

Todo el mundo tiene ideas, metas, esperanzas y sueños. Sin embargo, no se levantan cuando suena el despertador, y desayunan camino al trabajo, al que llegan tarde.   Están cansados con resaca del fin de semana.  Llegan a casa para ver televisión hasta quedar dormidos. Pero como la televisión y los medios de comunicación están siempre  mostrando historias de personas que viven vidas perezosas, pero que terminan siendo héroes, ricos y famosos porque un día se topan con circunstancias extraordinarias… se imaginan que así también serán sus vidas.

Vivimos sin foco, sin intencionalidad, ni ética de trabajo, a la espera de ese gran momento que cambie nuestra vida para finalmente darnos nuestra gran oportunidad.

Pero no es así como funciona.

Benjamin Franklin dijo que "la felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte –que rara vez ocurren– sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días”

Nuestros hábitos diarios son la forma en que creamos nuestras propias ventajas.  No nos quedamos pasivos a la espera de que algo va a venir a cuidarnos y finalmente hacernos felices y exitosos.  En lugar de ser pasivos, debemos trabajar y exigirnos a nosotros mismos con el fin de crear pequeñas ventajas cada día. Esas pequeñas ventajas se suman con el tiempo. Por ejemplo, si escribes por lo menos cien palabras cada día, muy pronto tendrá una novela entera. Puede ser un primer borrador de mierda, pero al menos la has escrito en vez de quedarte solamente con la idea.

Vivir contracorriente

Si te propones vivir como nadie más, después de un tiempo vivirás como nadie más. – Dave Ramsey

La mayoría de los atletas no participarán en los Juegos Olímpicos. La mayoría de las nuevas empresas no serán compradas por mil millones de dólares. La mayor parte de escritores no llegarán a la lista de best sellers del New York Times. Y eso está bien. Todos tenemos nuestras propias definiciones de éxito, pero la fama y el reconocimiento mundial no tienen que ser uno de ellos.

¿Cuántos empresarios toman el riesgo de empezar su propio negocio? ¿cuántos escritores empiezan a escribir ese libro que saben que tienen que contar?

Desafortunadamente, la mayoría de nosotros no estamos rodeados de personas altamente enfocadas, individuos enérgicos, de éxito, que sean ejemplo para nosotros. Al contrario, nuestras aulas y lugares de trabajo y ciudades están llenos de gente que son buenos en gastar más de lo que tienen mientras ven la televisión, revisan su facebook y pasan el tiempo con juegos de video. ¿No es tonto  pensar que nosotros tenemos mayor oportunidad de lograr nuestras metas, mientras vivimos como la mayoría de las personas, que nunca lograrán las suyas?

Hay una métrica que te puede ayudar a determinar si estás en camino a alcanzar tus objetivos: ¿estás gastando tu tiempo, tu dinero, y prestando atención de manera diferente a la mayoría de la gente?

La verdad es que la mediocridad es natural. No tienes que hacer nada. Simplemente sucede. Pero si quieres crear realmente experiencias únicas –y si quieres construir tu plataforma– entonces necesitas tener coraje. – Michael Hyatt, Plataforma

Si yo dejara que mi vida sea tomado por lo que es urgente, podría muy bien no moverse a lo esencial. – Henri Nouwen

(...)  Las tareas urgentes siempre nos encontrarán. Es por eso que tenemos que ser proactivos en hacer tiempo y espacio para las tareas importantes.

Los hábitos diarios nos mantienen en camino de lograr nuestros objetivos y poner en práctica nuestras ideas. Nos hacen espacio para aparecer todos los días y hacer las cosas importantes. Sin hábitos diarios, sólo reaccionamos a lo que es más urgente, rara vez haciendo un progreso significativo en el trabajo que importa.